La forma de vestir y los hábitos diarios de cuidado personal son una parte importante de nuestro estilo y hablan por nosotros.
Hay muchas cosas este año que están fuera de tu control, pero tienes jurisdicción completa sobre tu estilo y apariencia.
El Modo de Vestir es muy importante
Deshazte de prendas que no usas
No hay nada mejor que sumergirte profundamente en tu armario (no de forma literal…) y hacer una limpieza correcta. Si hay prendas que no has usado desde el año pasado o temporadas anteriores, deshazte de ellas para dejar espacio para las nuevas prendas.
Si todavía no puedes afrontar el desafío, prueba este práctico truco: gira todas las perchas de tu armario de la misma forma; Después de usar una pieza, vuelve a guardarla en tu armario con la percha al revés. Después de unos meses, podrás ver qué prendas no has usado, ya que serán las únicas que no se habrán puesto del revés.
Apuesta por prendas nuevas
Ahora que has hecho espacio en tu armario, es el momento perfecto para actualizarte y reinventarte. Toca el momento de llenarlo con ropa nueva.
Cuidado con las compras impulsivas porque suelen a ser las que menos se usan, así que piensa primero y compra prendas atemporales de las que sepas que vas a aprovechar mucho. Es bueno para tu monedero y también para el planeta.
Amplía tus horizontes olfativos
Uno de los grandes errores cuando hablamos de fragancias es tener solo una. Es posible que sea tu aroma de referencia. Eso está bien. Es bueno tener un perfume «uniforme» para tu día a día. Pero es bueno cambiar la fragancia según la temporada y/o la ocasión.
Los aromas amaderados, ahumados, coriáceos y picantes funcionan mejor en los meses de invierno, ya que tienden a durar más en la piel sin que el frío los debilite, mientras que los aromas frescos, florales y cítricos se adaptan mejor al verano.
Aparte de eso, vale la pena gastarse un buen dinerillo en una fragancia premium para agregar ese toque olfativo final en ocasiones especiales.
Compra con conocimiento
En este blog somos unos firmes defensores de comprar las prendas mejores que puedas pagar. Las prendas de calidad pueden parecer caras, pero cuando se tiene en cuenta que las seguirás usando durante años o incluso décadas, los precios comienzan a sentirse mucho más justificados.
Además, también pondrás tu granito de arena para reducir las emisiones de CO2. Porque pagar más por algo que está fabricado para durar siempre es mejor que pagar menos por algo que está destinado al basurero…
Mejora tu estilo deportivo
Necesitas un nuevo look para ir al gimnasio o, si estás confinado, hacer deporte en casa pero con estilo. Deshazte de las camisetas de algodón con manchas de sudor, los joggers dados de sí y las zapatillas deportivas que apenas se sostienen, y en su lugar, disfruta de un elegante look de entrenamiento.
Las prendas clave que debes buscar son camisetas que absorben el sudor en tejidos técnicos, pantalones de chándal ajustados o pantalones cortos de corte deportivo, algo de calzado especialmente diseñado y una bolsa de gimnasia de calidad. Es posible que un equipo atractivo no te haga más fuerte o más rápido en un sentido directo, pero sin duda te motivará a levantarte del sofá y salir al gimnasio o hacer deporte desde tu hogar.
Crea un armario cápsula
Puede parecer contradictorio, pero tener menos ropa a tu disposición puede hacer que verte bien sea más fácil. Se llama tener un armario cápsula a hacerte con una selección básica de prendas de calidad que cubran todos los básicos y funcionen en perfecta armonía.
Construir un armario cápsula te permitirá ir bien vestido en cualquier situación sin tener que pensar demasiado en ello. Compra prendas clásicas como camisetas lisas, camisas Oxford, denim crudo, un traje azul marino de corte ajustado, botas, zapatos Derby y zapatillas de cuero blancas.
